Se presentó libro sobre el heroísmo de diplomático chileno Samuel del Campo durante el Holocausto
En el Campus Santiago de la Universidad de Valparaíso se realizó el lanzamiento del libro “La diplomacia más allá del deber. La inédita historia de Samuel del Campo: Chile y el Holocausto”, de Jorge Schindler. El presentador fue el profesor Juan Egaña, licenciado en Historia, magíster en Estudios Internacionales y jefe de carrera de Ingeniería Comercial en el Campus Santiago.
En la ocasión se destacó que el diplomático chileno Samuel del Campo no solo debe ser considerado como un “héroe” que salvó a más de mil personas (refugiados polacos de origen judío) de morir a manos del régimen nazi, sino también que la diplomacia local en aquella época fue primero “ambigua” y luego, en los momentos más difíciles del Holocausto, marcadamente “discriminatoria” hacia la inmigración de judíos y otros grupos. A juicio del autor, esta obra -que se basa en documentos oficiales y fidedignos- permite derribar mitos en torno a la actuación de Chile durante aquellos años.
“Nuestra política exterior, nuestra diplomacia, era como entrar en una pieza a oscuras, con los ojos vendados y con el suelo lleno de huevos, en el sentido de que no había que romper ninguno y esa era la misión: no importunar al país, Alemania, que en ese momento era tan importante para Chile como socio comercial”, explicó Schindler.
En ese contexto, añadió, personajes como Samuel del Campo “eran molestos tanto para los países en los cuales él se desempeñaba como para la diplomacia chilena. Porque si bien intentó informar lo más claramente que pudo de la situación que se vivía en Rumania con la población refugiada judía, no lo podía hacer muy abiertamente, dado que las comunicaciones estaban intervenidas por los servicios secretos”.
Schindler explicó que el protagonista de su libro ayudó mediante acciones como revalidar pasaportes o entregar pases para que muchas personas circularan sin riesgo de ser detenidas por la policía rumana colaboracionista o por los alemanes. Pero, en su opinión, “el acto más heroico ocurrió en la ciudad de Chernivtsí, que ahora está en Ucrania, cuando logró rescatar a 250 familias -lo que nos lleva a pensar que fueron al menos quinientas personas- de los vagones de ganado que se dirigían a un campo de concentración o exterminio, y pudo devolverlos a sus viviendas (…)”.
“En nuestro país no tenemos un gran conocimiento de que tenemos un héroe ni tampoco de nuestro papel en esos hechos internacionales (…). Se puede constatar que si Chile hubiese tenido una política distinta, si no hubiesen existido esos prejuicios hacia la inmigración del momento, que en su mayor parte eran personas de origen judío, tal vez habrían sido muchas más las vidas que se podrían haber salvado”. A los judíos incluso se les calificó en aquel tiempo como “elementos disolventes”, indicó Schindler, quien es licenciado en Historia.
El libro, según el funcionario diplomático, “nos lleva a reflexionar que hemos construido mitos. Específicamente la figura del presidente de esos años, Pedro Aguirre Cerda, es un verdadero mito en Chile y, sin embargo, nos encontramos con una parte oscurísima de su gobierno que fue el antisemitismo. Respecto de las razones podemos especular con la importancia de Alemania en temas económicos, pero no hay una justificación para la utilización de conceptos raciales por parte del gobierno chileno”.
Por lo tanto, añadió Schindler, “yo sostengo que tenemos una responsabilidad de no haber sido más generosos en nuestra política migratoria, de haber caído en estereotipos muy cercanos a los que tenían los nazis respecto de los judíos y que es un pasado que deberíamos trabajar como país para proyectar nuestro futuro. Con mucho dolor debo decirles que, si bien no soy una persona religiosa y me defino como libre pensador, considero inaceptable que en un país se quemen iglesias. Porque los alemanes quemaron las sinagogas y después quemaron personas. Como sociedad no debemos aceptar que en nuestro país ardan los templos de ninguna especie”.
”Un héroe de la paz”
Juan Egaña sostuvo que el trabajo de Schindler “es muy valioso en tiempos donde ciertos tipos de intolerancia han regresado en el mundo y, por qué no decirlo, en Chile también. El trabajo da cuenta de estos buenos seres humanos que trascienden a una nacionalidad”.
El académico de la UV está convencido de que Samuel del Campo “es una persona que merece un lugar importante en nuestra historia. A veces uno se pregunta ¿y dónde están nuestros héroes? aparte de los que ya conocemos. Y él fue un héroe de la paz, un civil que usó las herramientas que la diplomacia le permitía y ayudó a salvar a más de mil personas”.
Sobre el contenido del libro, Egaña detalló que “el texto nos acerca mucho a la posición que tuvo el Estado de Chile durante el periodo de la Segunda Guerra Mundial. Podemos ver el tránsito de, a lo menos, dos o tres gobiernos comenzando por el segundo gobierno de Arturo Alessandri y los gobiernos del Frente Popular de Pedro Aguirre Cerda y, en las postrimerías de la Guerra, de Juan Antonio Ríos”.
Agregó que “en Chile a veces hay una imagen un poco novelada de la participación del país durante la Segunda Guerra Mundial. Algunos hacen un correlato de lo que pasaba en Europa y en Chile, la emergencia de ciertos partidos de tono nacionalsocialista. Pero lo más valioso del trabajo de Jorge Schindler es que él trabaja con fuentes oficiales y declaraciones ministeriales de los gobiernos de esa época”.
En el evento, conducido por la encargada de comunicaciones de RIL Editores, Marialmi Rodríguez, estuvieron presentes la directora de la Escuela de Ingeniería Comercial, Tania Jakasovic; la directora del Campus Santiago, Valeria Scapini, académicos/as, estudiantes y público general.