La Escuela de Administración Pública inauguró su año académico 2021 con una ceremonia en la cual participaron alrededor de ochenta personas entre autoridades, académicos/as y estudiantes, y en la cual doctor en Ciencias Sociales Egon Montecinos dictó la conferencia “Descentralización, Ideología y Romanticismo de la Distribución Territorial del Poder de la nueva Constitución".
El acto fue encabezado por el rector de la Universidad de Valparaíso, Osvaldo Corrales. Además, estuvieron presentes el prorrector, Christian Corvalán; el vicerrector académico, Carlos Becerra; el decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas, Óscar Fariña; y el director de la Escuela de Administración Pública, Diego del Barrio.
En su intervención, el rector Osvaldo Corrales subrayó el simbolismo que supone este tipo de actividades para la Universidad. “A partir de este momento los estudiantes comenzarán a familiarizarse con conceptos propios de la carrera como estatuto administrativo, administración púbica o ciencia política, pero también comenzarán a vivir una educación que es más de lo que se aprende en clases, en el diálogo con los compañeros y compañeras, en los pasillos, en las bibliotecas”, dijo, agregando que probablemente más que respuestas, a la universidad vendrán a encontrar preguntas.
Por su parte, el decano Óscar Fariña, señaló que en el contexto de crisis de las instituciones públicas producto del estallido social, la pandemia y el proceso que el país emprende para redactar una nueva Constitución, no sólo se necesitarán profesionales a la altura de las grandes exigencias de la disciplina, sino “sobre todo, profesionales con una mirada ética de la sociedad, que ha de construirse a partir de mañana, con una mirada refrescante y moderna de un aparato público que satisfaga las expectativas ciudadanas en la construcción de un país más justo y libre”. La máxima autoridad de la Facultad agradeció también el esfuerzo realizado por la comunidad universitaria en mantener en un alto nivel el trabajo administrativo y académico de la Facultad y la Escuela en estos tiempos tan difíciles “que estoy seguro vamos a superar exitosamente”.
En sus palabras de bienvenida, el director de la Escuela, Diego del Barrio, saludó a los asistentes y agradeció la presencia de las más altas autoridades de la Universidad y de la Facultad, invitó a los estudiantes a relevar la importancia de la formación de administradores públicos en un contexto social de alta exigencia para que el estado pueda cumplir su misión y abogó por profesionales que impulsen una mejor gestión pública en temas de transparencia, probidad, eficiencia y también en descentralización.
Distribución del poder
En su presentación, Montecinos planteó que la discusión constituyente actual sobre la descentralización del país se asemeja a una canción de moda que parece ser del gusto de todos, pero cuya letra se desconoce. A su juicio, el tema de fondo es el tipo de Estado que queremos y cómo se distribuirá el poder en el territorio: ¿unitario, federal, mixto? Para ello, indicó, hay que “revisar las bases ideológicas del Estado y la descentralización”, ya que esta problemática no puede quedar reducida a una discusión sobre mejores políticas públicas para regiones.
Asimismo, Montecinos sostuvo que se debe analizar cuál es el verdadero propósito de una descentralización. En su opinión, ha predominado desde tiempos de la dictadura la idea de liberar al mercado para competir en temas sociales. Sin embargo, indicó que el Estado no debería ser débil en las regiones, sino que estar empoderado de los territorios para reducir las desigualdades sociales.
El académico, quien es director del Centro de Estudios Regionales y del Desarrollo Territorial y del Instituto de Administración de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad Austral de Chile, reconoció que es muy difícil superar la mirada centralista en Chile. A modo de ejemplo, señaló que junto con la creación de la figura del gobernador, que será elegido democráticamente, habrá un delegado presidencial designado que, en la práctica, coordinará varios servicios públicos e incluso podrá gestionar un mayor presupuesto que la autoridad votada por la gente de cada territorio. Otro hecho que demuestra aquello es que en la actual Constitución los municipios solo tienen mandato para administrar, lo que no es suficiente para que sean realmente considerados gobiernos locales.
“La descentralización es un asunto de distribución de poder político. No es una política neutra, lleva consigo una carga ideológica sobre una idea de sociedad y un tipo de Estado”, indicó.
