Patricia del Villar,  académica de Auditoría de la Universidad de Valparaíso en el Campus Santiago, realizó un balance de las medidas tributarias para favorecer la liquidez en las empresas, que fueron anunciadas por el Gobierno como parte de un plan de estímulo económico para enfrentar los efectos del coronavirus (COVID-19) en Chile. “Entre las medidas que encuentro más acertadas, destaco dejar la tasa del impuesto de timbres y estampillas en 0%. Aunque sea algo transitorio, permitirá bajar el costo del crédito, facilitando que las Pymes puedan acceder a estos. También considero positivo que todos los gastos de las empresas para enfrentar la crisis se acepten como gasto tributario, pues se supone que se hicieron para proteger a los trabajadores y personal de la empresa”, dijo Del Villar.

A juicio de la académica, otras medidas que apuntan en la dirección correcta son los “convenios por deudas con la Tesorería General de la República, que serán sin intereses y sin multas. Esto es bueno, ya que permite que se regularicen las deudas”. Asimismo, Del Villar valoró positivamente que el SII pueda autorizar la emisión de facturas electrónicas a contribuyentes con incumplimientos tributarios leves, para que de este modo “las empresas puedan tener ingresos”.

Por otro lado, la experta tributaria consideró beneficioso para las empresas la aceleración de pagos a proveedores del Estado (pagos pendientes se concretarán en abril próximo y las nuevas facturas serán pagadas antes de 30 días), aunque matizó que “esto debiera ser siempre así”.

A esto se le suma la “compra ágil enfocada en las Pymes para todas las compras del sector público menores a $1.500.000. Considerando que estas compras representan un alto porcentaje de las compras del Estado, esta es una muy buena noticia para que las Pymes puedan recuperarse”, opinó la profesora del Campus Santiago de la UV.

Se recordará que el plan también implica postergar el pago de IVA, “que si bien ya se estaba haciendo “lo rescatable es que en este momento para la declaración de marzo que se debería pagar entre el 12 y 20 de abril de 2020, se puede diferir el pago del IVA de 6 a 12 cuotas sin intereses”, expresó Del Villar.

Asimismo, se anticipará la devolución de renta desde el 21 de abril próximo. Y para quienes, al efectuar su declaración de renta dentro del plazo, queden obligados a pagar impuesto, este se podrá diferir hasta el mes de julio de 2020. Al respecto, a la académica le parece “una buena medida, esperando que la crisis se haya superado ya a esa fecha”.

Medidas insuficientes

Por otro lado, la profesora Del Villar indicó que hay algunas medidas tributarias propuestas que le parecen insuficientes. Es el caso del anuncio sobre “suspender el PPM por tres meses. Considerando que este PPM es para cubrir el Impuesto de Primera Categoría del próximo año, se debería suspender todo este año por esta vez. Y cuando se supere esta crisis, el SII no debería aplicar multas  sobre los PPM a los contribuyentes que no puedan pagarlo en forma mensual, ya que esta provisión es un adelanto para el pago de impuesto a la renta que se debe enterar en abril del próximo año”.

En cuanto a postergar la cuota de contribuciones de abril  y separarla en tres para sumarla a las tres cuotas restantes, Del Villar sostuvo que “creo que solo agravará la situación, quizás debiera ponerse al final de las cuotas  del año o a principios del próximo, pues saliendo de la epidemia, las personas se encontraran aún con pocos ingresos y con muchos compromisos que no podrán cumplir”.