En Campus Santiago presentan informe de autoevaluación con mejoras en todas las áreas
Los últimos cinco años han sido complejos y desafiantes, con fenómenos como el estallido social y la pandemia del covid-19 y, sin embargo, la Universidad de Valparaíso logró mejoras objetivas (avaladas por datos) en este periodo respecto de su anterior proceso de acreditación institucional (2017) en todas las áreas que se evalúan: gestión, docencia de pregrado, docencia de postgrado, investigación y vinculación con el medio. Por ello, la institución tiene positivas expectativas de cara a la siguiente etapa del proceso, que es la visita de pares evaluadores. En ese marco, se realizó la presentación del informe de autoevaluación en el Campus Santiago.
“Debemos enfrentar este proceso de acreditación institucional como una comunidad, con la mayor cohesión posible, porque del resultado del mismo dependen muchas cosas (…). Por lo tanto, es muy importante que todos y todas conozcamos los resultados de este informe y que las preguntas o dudas que tengamos las podamos vehiculizar en este espacio, con miras a la visita de los pares evaluadores, que sería hacia fines de octubre o principios de noviembre”, manifestó el rector Osvaldo Corrales.
En la actividad de difusión de los aspectos más destacados del informe (texto que posee más de seiscientas páginas) participaron el rector Corrales; el prorrector, Christian Corvalán; la directora general de Desarrollo Institucional y Aseguramiento de la Calidad, Soledad Narea; la directora del Campus Santiago, Valeria Scapini; y el director de Autoevaluación y Acreditación, Álvaro Jeria. Asistieron a esta reunión informativa representantes de centros de estudiantes, académico(as), incluyendo a jefes de carreras, y funcionario(as), quienes aportaron con sus comentarios y opiniones al respecto.
“Este es un proceso neurálgico para la Universidad de Valparaíso. Realizamos un trabajo intensivo desde marzo de 2021 hasta junio de este año, cuando se cerró el informe de autoevaluación. En las comisiones que estuvieron a cargo de las áreas que se presentan a acreditación hubo participación de estudiantes, funcionarios y funcionarias, académicos y académicas”, explicó Soledad Narea.
Agregó que “es la primera vez que este informe se elabora en conjunto con el sello editorial de la Universidad de Valparaíso y por eso tiene una gráfica bastante distinta”, que permite simbolizar aspectos como la perspectiva de género o el compromiso con el medio ambiente y la sustentabilidad. Recordó que el objetivo de la acreditación institucional es obtener un certificado de calidad y es un proceso “que está instalado en la Ley 21.091 sobre Educación Superior y que es obligatorio para las universidades”. Pero, más allá de lo normativo, “nos parece importante y estratégico el poder instalar una cultura de calidad en la comunidad universitaria”, planteó la directora.
Si bien el documento rescata las mejoras que ha logrado la Universidad de Valparaíso en su globalidad, durante la presentación se ejemplificaron avances específicos del Campus Santiago. Por ejemplo, en el último lustro se invirtieron sobre 550 millones de pesos en infraestructura y equipamiento y el recinto creció en número de metros cuadrados para su operación. Asimismo, se registró un aumento en la tasa de retención de primer año, se inició un programa de postgrado (Magíster en Gobierno y Gestión Pública), se están realizando investigaciones y publicaciones indexadas y se ha potenciado la vinculación con el medio.
A lo anterior se suma que todas las carreras del Campus Santiago tienen certificación de calidad de siete (Administración Pública e Ingeniería en Negocios Internacionales) o cinco años (Auditoría, Ingeniería Civil Industrial e Ingeniería Comercial).
“El concepto que define al Campus Santiago es consolidar ese proceso de complejidad”, subrayó el prorrector Corvalán.
Expectativas de acreditación
Sobre la expectativa de acreditación, Soledad Narea destacó que considerando el informe de autoevaluación en su conjunto -que contempla tanto fortalezas como debilidades- “estamos muy por encima de todas las universidades que están acreditadas por cinco años en todos los indicadores. Nuestro nicho son las universidades que tienen seis años. Y en lo personal tengo confianza en eso”.
“Tenemos altas expectativas, porque creemos que ha sido un proceso participativo en el cual nos podemos ver reflejados todos y todas, ver las posibilidades y desarrollos que ha tenido la Universidad de Valparaíso, así como también nos hacemos cargo de las brechas en las que tenemos que seguir mejorando y los desafíos que implican para una institución estatal el escenario que viene por delante. Así es que estamos con mucho optimismo. La Universidad ha trabajado seria y responsablemente en este proceso”, complementó el prorrector.