Experto en logística alerta que “Chile ha perdido terreno en infraestructura para el comercio internacional”
Un viejo adagio advierte que “no hay que dormirse en los laureles”. Y este sabio refrán bien podría aplicarse a la actual situación de Chile respecto de sus condiciones de infraestructura para sostener y sobre todo proyectar el creciente comercio internacional (exportaciones e importaciones), considerando además la fuerte competencia de otros países de la región.
“Chile ha perdido terreno en infraestructura para el comercio internacional, por ejemplo, frente a Perú que hoy tiene el puerto de Chancay, que podrá recibir contenedores gigantes”, ejemplificó Rodolfo Valenzuela, máster en Dirección de Logística Internacional de la Universidad Autónoma de Barcelona y director de la empresa Click and Connect, quien expuso y participó en un conversatorio sobre “El estado del comercio exterior” junto a la directora de esta misma empresa, Paula Pastén, en un evento organizado por la Escuela de Negocios Internacionales.
La actividad, que se llevó a cabo este martes 7 de mayo en el teatro del Campus Santiago de la Universidad de Valparaíso, estuvo dirigida principalmente a estudiantes y fue conducida por Daniella De Luca, jefa de carrera de Ingeniería en Negocios Internacionales en el recinto de San Miguel.
Valenzuela planteó que el volumen de productos que mueve el comercio internacional se ha incrementado notablemente en las últimas décadas por los tratados de libre comercio, la expansión de la economía y el auge del comercio electrónico. Sin embargo, alertó que nuestro país no ha ido a la par de esa expansión en materias como puertos capaces de recibir a buques de gran calado, aeropuertos, carreteras y ferrocarriles. A su juicio, este problema se debe resolver con una política de Estado y fuertes inversiones públicas y privadas.
“Creo que si Chile quiere ser competitivo hay que poner las fichas en el comercio exterior, que las pymes sean competitivas. Para que nuestros productos lleguen a más mercados debemos contar con infraestructura para ello. Esto implica que puedan llegar barcos más grandes, con mayor disponibilidad de contenedores, etcétera. Y también controlar un poco los costos extraportuarios y portuarios que a veces son exorbitantes y hacen muy difícil que las empresas tengan precios y costos más adecuados”, sintetizó luego del conversatorio.
Sobre cómo se puede resolver este déficit en infraestructura, señaló que “tiene que haber una política de Estado y una voluntad pública y privada” para invertir en lo que se requiere.
Cabe recordar que el Estado, a través del Puerto San Antonio, espera concretar una inversión de tres mil 500 millones de dólares en el proyecto “Puerto Exterior”, que según la compañía “se ha diseñado para movilizar hasta seis millones de TEU al año y recibir buques portacontenedores clase E (con eslora de 400 metros y capacidad máxima de 15 mil TEU)”. Esta iniciativa es de largo aliento (unos ocho a doce años) y próximamente deberían iniciarse las obras. En el caso del megapuerto Chancay de Perú, el consorcio chino peruano que lo desarrolla prevé iniciar operaciones en 2024 y estima que podría atracar contenedores de más de 18 mil TEU.
Valenzuela comentó que para asimilar el aumento de las cargas que se requiere transportar, “el tren es una tremenda alternativa, de bajo costo y que da mucha conectividad, porque llega al mismo puerto”. Explicó que este potencial no solo podría cubrir las necesidades de carga en el centro del país, sino también en otras zonas como el sur. Según el ejecutivo, es necesario que en el país “el ferrocarril participe más directamente del comercio internacional”.
En su visita al Campus Santiago de la UV, Valenzuela también destacó la calidad de las preguntas de los y las estudiantes de Ingeniería en Negocios Internacionales y dijo tener la certeza de “que serán muy buenos profesionales”.