Alianza entre la UV e Idegys debuta con foro internacional en el Campus Santiago
El foro internacional “Seguridad social, universalidad y seguros complementarios” marcó el inicio de la alianza estratégica entre la Universidad de Valparaíso y el Instituto de Economía, Gestión y Salud (Idegys), que eligió a Campus Santiago como su sede operativa.
En el encuentro participaron la doctora en Ciencias Económicas Beatriz González López-Valcárcel, académica de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, España; el doctor Osvaldo Artaza, decano de la Facultad de Salud y Ciencias Sociales de la UDLA y exministro de Salud; y Rafael Urriola, director de Economía y Salud de Idegys. A cargo de la moderación estuvo la doctora Valeria Scapini, directora del Campus Santiago de la UV.
Fabián Norambuena, exdirector de la Asociación de Economía de la Salud de Chile y actual presidente del Idegys, explicó que esta entidad “busca desarrollar capacidades en los sistemas y servicios de salud mediante la aplicación y creación de herramientas, técnicas y capacidades en los y las profesionales del ámbito de la salud (clínicos y no clínicos) acordes a los desafíos propuestos por las personas, comunidades, usuarios, y los mismos trabajadores y trabajadoras de la salud”.
El Idegys -añadió- se unió a la Universidad de Valparaíso mediante su Facultad de Ingeniería para desarrollar cuatro líneas específicas: economía y gestión de la
salud, salud digital (telemedicina y salud comunitaria), cooperación internacional en economía y gestión de la salud y soberanía alimentaria y alimentación.
“Con esta alianza no solo esperamos crear nuevas capacidades en los sistemas y servicios de salud con una mirada regional en las Américas, sino también aportar al diseño y desarrollo de políticas públicas nacionales y locales que permitan a las personas vivir de forma digna, equitativa, solidaria e innovadora”, sostuvo Norambuena.
Hacia un sistema de salud distinto
En el foro los expositores plantearon que no se deben mantener las cosas tal cual están hoy en Chile en materia de salud y que el desafío es cómo generar un nuevo y mejor sistema que resuelva las necesidades de las personas. También coincidieron en que es necesario fortalecer la salud primaria.
El exministro de Salud Osvaldo Artaza fue particularmente crítico sobre la falta de voluntad política desde los años 90 a la fecha para modificar esta realidad, indicando que “Chile ha sido incapaz de cambiar la estructura de nuestro sistema segmentado y fragmentado de salud. Y esto no ha sido por incapacidad técnica, sino política”.
Pero, al mismo tiempo, los expertos advirtieron que no se puede olvidar que los recursos son siempre escasos y que, por lo mismo, deben ser gestionados de manera eficiente y teniendo un enfoque más integral de la salud.
En ese sentido, Artaza sostuvo que “cualquier modificación que hagamos en el sistema de salud va a fracasar, por mucho que aumentemos los recursos, si no tenemos una mirada salutogénica centrada en anticipar el daño y nos salimos de la trampa o paradigma hegemónico que tenemos en nuestro país como es el modelo biomédico tan centrado en el hospital, en las especialidades, etcétera”.
El exministro ironizó que el nombre del Ministerio de Salud debería ser “Ministerio de la Enfermedad” y explicó que “deberíamos avanzar en un Constitución garantista de derechos sociales que promuevan el buen vivir, desde asegurar el acceso a la alimentación saludable, a la actividad física, legislaciones que impacten sobre el consumo de alcohol y tabaco y medidas coherentes, sinérgicas y políticas sociales que apunten a disminuir el sobrepeso y la obesidad. Esa es la mejor contribución para tener una población sana y un nivel de bienestar en la línea de los objetivos de desarrollo sostenible”.
Artaza sostuvo que actualmente “no tenemos un plan de tipo universal”, ya que el GES solo cubre un “subconjunto de problemas importantes, pero muy acotados”. Por lo tanto, indicó que si se elige el camino del plan universal o de la universalización de la oferta, las decisiones que se tomen deben ser “racionales, éticas, equitativas y justas”.
Situación preocupante
Beatriz González, expresidenta de la Asociación de Economía de la Salud de España, puso de relieve que desde 2015 la OMS y la ONU promueven, entre los Objetivos de Desarrollo Sostenible, la “Universal Health Coverage”. Es decir, “la asistencia universal para todos los seres humanos del planeta que consistiría en cubrir una gama de servicios amplísima desde la prevención y promoción de la salud hasta la hospitalización para todos los habitantes”.
Asimismo, señaló que según un reciente informe de la OCD, que compara a países de Latinoamérica y todos los desarrollados del mundo, Chile aparece en una posición “preocupante como un porcentaje muy bajo en cuanto a la población satisfecha con la disponibilidad de asistencia sanitaria de calidad. Por otro lado, aparece como un porcentaje muy alto de gasto de bolsillo de los hogares en sanidad. Y esto es preocupante porque es relativamente alto comparado con la media de la OCDE”.
Conceptos para la discusión
Rafael Urriola, expresidente de la Asociación de Economía de la Salud de Chile, había iniciado el foro destacando que nuestro país está viviendo una etapa crucial de cambios y uno de los conceptos fundamentales en el tema de la salud es “la universalidad que está planteado en el programa del Presidente electo (Gabriel Boric)”.
Precisó importantes diferencias entre los seguros privados y los seguros sociales de salud. “Los fondos de seguridad social son aquellos que son obligatorios -corresponden a una ley-, no están sujetos a un contrato y no aseguran partes o planes específicos. Eso es lo que se quiere discutir, si las isapres corresponden a seguridad social, cómo podrían serlo o cómo podrían aportar”, dijo Urriola.
En cuanto a la universalidad, el director de Idegys dijo que según la OPS la “cobertura universal es que todas las personas tengan los bienes y servicios de salud de acuerdo a sus necesidades. Pero siempre hay una diferencia entre ese ideal y lo que realmente los países son capaces de dar (…)”.
“En Chile se podría pensar que lo universal es esencialmente la atención primaria, las coberturas GES y la atención de urgencia. Pero si uno tiene alguna enfermedad que no cabe en ninguna de esas, probablemente va a tener una lista de espera enorme”. Por lo tanto, arguyó, cuando no hay universalidad se producen déficits que obligan a tomar decisiones sobre el uso de los recursos y jerarquizar las necesidades.
Sobre los “seguros complementarios”, Urriola explicó que estos buscan asegurar la cobertura de ciertas prestaciones que el sistema no entrega. Además, indicó que un análisis de la CASEN mostró que casi en el 14% de los hogares hay algún seguro complementario. Sin embargo, estos se concentran en los grupos de mayores ingresos.
El registro del foro se puede ver en https://youtu.be/iAml8QU56Qw.